¿A DONDE VAMOS?

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Es lamentable que España se haya convertido en un país donde parece que sólo existe la política. Un ejemplo: RADIO 5 TODO NOTICIAS trasmite cada media hora un espacio para que los dirigentes de los partidos engañen a sus posibles votantes con promesas que no van a cumplir, y el oyente tiene que dispararse el sonsonete que no para durante las 24 horas del día. Además, en cada boletín de noticias (informaciones) el 90% es de asuntos políticos y el 10% restante de fútbol (aunque dicen "ahora los deportes"). Con esa norma lo que lograrán es que, al igual que con la TVE, cada día haya menos oyentes que se vean en la necesidad de buscar otras fuentes que no lo atosiguen tanto con más de lo mismo: aburre tanta repetición y demuestra que nuestros periodistas tienen las neuronas en huelga: no las necesitan, sólo con repetir la propaganda política ya llenan sus contenidos laborales y cobran sus sueldos sin ningún problema...

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Muchas veces me he preguntado si sera cierto que la televisión influye en el desarrollo mental de las personas que dedican varias horas de su dia a sentarse frente a la caja de los tontos y tengo que reconocer que no todo lo que se emite por los canales de tv es nefasto para el ntelecto humano. Hay, como en todo, muchas excepciones. El problema está en el porciento de personas que ven esas excepciones, y ahí es donde la calidad pierde por goleada, porque por cada 1 de los que ven programas culturales serios hay por lo menos 49 que lo que ven es la llamada telebasura, cuya influencia sí se nota que es perjudicial, sobre todo para la gente de menos edad (la edad en que un joven comienza a formarse en ideas, gustos, costumbres, etc.) que consume, según estadísticas, una parte tan descomunal de su tiempo libre que a veces lo dudo, porque son tantas horas embutiéndose de porquería, que es casi imposible ceder a su adicción, cosa que saben los productores de esos programas que se mantienen a pesar de las críticas duras que reciben de personas, oficiales y privadas, que se quejan de tanta basura y además de tanta publicidad estúpida y súper repetida hasta el cansancio. Y muchas veces, tratando de encontrar otro canal que no la tenga, tiramos la toalla, porque parece que se ponen de acuerdo por grupos de empresas para trasmitir los anuncios (que por cierto incumplen la ley de cantidad de minutos por cada hora, pero eso a nadie le interesa, la "justicia" está muy ocupada con otras cosas, sobre todo con otras cosas políticas)…

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En definitivas, es cierto que nadie está obligado a sentarse en el sofá a ver y oír las banalidades que ofrece la TV (o la radio), pero si tenemos en cuenta que nuestra población de edad avanzada es cada día mayor, y que para la mayoría el casi único entretenimiento consiste en oír la radio y ver la televisión (los periódicos los lee solo una pequeña porción, y "por arribita", como se dice), tendremos como resultado que el pueblo del futuro próximo tendrá una cultura de televisión manipulada y radio controlada, porque lo que es leer libros hay que dejárselo a los "intelectuales", que son minoría abrumadora. En fin, que ante semejante desparpajo sólo queda el lamento, porque como dice mi vecina Carmen: "no sigan perdiendo el tiempo, que no van a arreglar el mundo, déjenle eso al que lo hizo, que parece que cuando lo hizo había bebido varias copas de más"...

Augusto Lázaro

@lazarocasas38

elcuiclo.blogspot.com.es