jueves, 26 de julio de 2018

POEMA 10

PRONUNCIARE TU NOMBRE

Cuando sepas que he muerto no pronuncies mi nombre
Roque Dalton (poeta salvadoreño)

Cuando yo esté muriendo pronunciaré tu nombre,
tu tan amado nombre
tantas veces regalado al viento
sin penetrar en tus oídos receptores
de otros susurros,
de otras voces distantes, porque siempre estás lejos,
muy lejos de mi voz, de mis ojos, de mis ansias,
atenta quizás a esa broma del viento
que se resiente a transportar mi artilugio
cuando alivio mis horas sempiternas vacías
en las que sólo alcanzo el infantil consuelo
de rememorar otras horas vividas
junto a ti sin pronunciar tu nombre muchas veces
como ahora lo hago sin tenerte delante,
sin que puedas captar mi clamor por descifrarte
en tu totalidad de mujer tímida y vergonzosa...
Entonces te busco en mi espacio vacío
y sólo puedo respirar mil gramos
de nostalgia de ti, de ti como imagen,
como una especie de astrolabio sensual
convertido a su vez en un arpegio
que define tu silueta femenina con sonidos musicales
a veces suaves, lánguidos a veces,
estruendosos como un marcial impromptu,
porque tú eres tú y otra más,
cuando te empeñas en no ser como tú,
esa mujer que quizás logre un día construir
(quizás no demasiado tarde)
en lo más inexplorado de mi imaginación...
Pero no me perdono no haber descubierto mucho antes
definitivamente
que eres siempre en tu fondo real
sin imposturas
como un nido de pájaros
resguardado de la lluvia y el frío
por el poder de las palabras exactas
con las que pienso que logro definirte
aunque tú hagas vanos intentos
por mantenerte ajena e infranqueable
como un muro de granito,
como una muralla ante la cual
sólo pueda pronunciar tu nombre
y echarte de menos...
Y ¿resignarme? (aunque me suene esa expresión
ridícula)
a morir una mañana de sol bravo
sin saborear la dulce miel de tus palabras
diciéndome al fin que me quieres...
Augusto Lázaro
@lazarocasas38


No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENVOLVENCIAS

 1 Ahora que los virus están de moda: fue un virus (de la peste negra o bubónica) el culpable de la muerte de los amantes de Verona. La hist...